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¿Alguna vez has conocido a alguien que parecía tener una necesidad casi patológica de agradar a los demás? De acuerdo con la psicoanalista Karen Horney, este comportamiento se debe a una necesidad neurótica de afecto y aprobación.
En su teoría de la neurosis Horney describe y explica los diferentes tipos de comportamiento neurótico como resultado de estrategias poco adaptativas de afrontamiento de la ansiedad. Estos comportamientos incluyen las necesidades neuróticas de poder, prestigio y afecto.
¿Cuáles son esas estrategias neuróticas que usamos habitualmente para manejar la ansiedad? A continuación vamos a echar un vistazo más de cerca a las tres categorías de necesidades identificadas por Horney.
La teoría de las necesidades neuróticas de Horney
La teórica psicoanalítica Karen Horney desarrolló una de las teorías más conocidas sobre la neurosis. Entre otras cuestiones planteaba que la neurosis tenía su origen en la ansiedad básica causada por las relaciones interpersonales.
Su teoría propone que las estrategias utilizadas para hacer frente a esta ansiedad pueden ser exageradas, haciendo que tomen la apariencia de necesidades.
De acuerdo con Horney, la ansiedad básica (y por tanto también la propia neurosis) podría ser el resultado de una variedad de situaciones interpersonales críticas vividas a una temprana edad, entre ellas:
“… la dominación directa o indirecta, la indiferencia, el comportamiento errático, la falta de respeto por las necesidades individuales del niño, la actitud despectiva, el exceso de admiración o la ausencia de ella, la falta de afecto fiable, tener que tomar partido en los desacuerdos de los padres, demasiada o muy poca responsabilidad, la sobreprotección, el aislamiento, la injusticia, la discriminación, las promesas no cumplidas, un ambiente hostil, y así sucesivamente….” (Horney, 1945).
A lo largo de su obra Horney describe 10 necesidades neuróticas que pueden clasificarse en tres grandes categorías:
- Necesidades que nos mueven hacia los otros.
Estas necesidades neuróticas provocan que los individuos busquen la afirmación y la aceptación de quiénes los rodean. Podrían categorizarse como dependientes, ya que buscan de manera constante y desproporcionada la aprobación y el afecto. - Necesidades que nos mueven lejos de los demás.
Su característica principal es el llamado “desapego neurótico”. Estos individuos son a menudo descritos como fríos, indiferentes, y distantes. Podrían llegar a categorizarse como esquizoides. Según la propia Horney “tienen la íntima necesidad de poner una distancia emocional entre ellos y los demás”. - Necesidades que nos mueven en contra de los otros.
Estas necesidades neuróticas dan lugar a la hostilidad, el comportamiento antisocial y la necesidad de controlar a otras personas. Son individuos a menudo descritos como difíciles, dominantes o tóxicos.
Las personas bien adaptadas utilizan las tres categorías de un modo equilibrado, cambiando el enfoque en función de diversos factores internos y externos.
Lo que convierte a estas estrategias inicialmente sanas y necesarias en estrategias neuróticas es el uso excesivo e indiscriminado de uno o más de estos estilos interpersonales, llegando a convertirse en demandas exageradas y totalmente distorsionadas.
En su libro “Autoanálisis” (1942), Horney esbozó las 10 necesidades neuróticas que había identificado previamente, y que pueden clasificarse en alguna de las tres categorías anteriores:
1. Necesidad neurótica de afecto y aprobación
Esta necesidad incluye los deseos de agradar, complacer y satisfacer las expectativas de los demás. Las personas con este tipo de necesidad son extremadamente sensibles al rechazo y la crítica y se sienten angustiadas ante la ira o la hostilidad de los demás. El neurótico que está en busca constante de afecto presenta a menudo una hostilidad encubierta que interfiere negativamente en todas sus relaciones.
2. Necesidad de una pareja que se haga responsable de tu propia vida
Esto implica la necesidad de vivir siempre en pareja. Las personas con esta necesidad sufren miedo extremo a ser abandonados por su pareja, y la posibilidad de estar solos les angustia.
A menudo dan una importancia exagerada al amor como sentimiento omnipresente, y creen que tener una pareja resolverá todos sus problemas. Podrían categorizarse como dependientes emocionales.
3. Necesidad neurótica de vivir dentro de estrechos límites
Los individuos con esta necesidad prefieren no llamar la atención y pasar inadvertidos. Son poco exigentes y por tanto se contentan con mucha facilidad. Evitan desear cosas materiales, a menudo convirtiendo sus propias necesidades en algo secundario.
Suelen infravalorar sus propios talentos y habilidades, y consideran la modestia el valor más importante.
4. Necesidad neurótica de poder
Los individuos con esta necesidad buscan el poder por sí mismo. Por lo general alaban la fuerza, desprecian la debilidad, y explotarán o dominarán a otras personas si tienen posibilidad de hacerlo.
Estas personas temen los límites personales, la falta de control y la sensación de incapacidad, y no suelen respetar la individualidad ni la dignidad de los demás.
5. Necesidad neurótica de explotar a los demás
Estos individuos ven los demás en términos de lo que pueden obtener de una posible relación con ellos, y en consecuencia manejan cierto temor a ser explotados o parecer estúpidos.
Las personas con esta necesidad por lo general se enorgullecen de su capacidad de explotar a otras personas y suelen utilizar la manipulación para obtener los objetivos deseados, incluyendo cosas tales como ideas, energía, dinero o sexo.
6. Necesidad neurótica de prestigio
Los individuos con una necesidad de prestigio se valoran en términos de reconocimiento y admiración pública. Su mayor temor es la vergüenza pública y la pérdida de estatus social.
Todo lo que son y lo que tienen, incluidas las relaciones interpersonales, es evaluado en base a ese valor distorsionado de prestigio y reconocimiento.
7. Necesidad de admiración personal
Los individuos con una necesidad compulsiva de admiración personal son narcisistas y egocéntricos, y manejan por tanto una auto-percepción exagerada. Quieren ser admirados en base a esta auto-imagen distorsionada y no por lo que realmente son.
8. Necesidad neurótica de superación personal
De acuerdo con Horney, este perfil se auto-exige para lograr objetivos cada vez mayores como consecuencia de una inseguridad básica. Son personas que temen al fracaso y la humillación, y que sienten una necesidad constante de alcanzar logros superiores a lo demás y a sus propios éxitos anteriores.
9. Necesidad de autosuficiencia e independencia
Son sujetos con una mentalidad solitaria, de perfil esquizoide, que tienden a distanciarse de los demás con el fin de evitar vincularse en exceso o ser dependientes de otras personas.
No requieren jamás la ayuda de nadie y no ceden a influencia alguna, en particular si ésta se visualiza como un compromiso.
10. Necesidad neurótica de perfección e inexpugnabilidad
Estos individuos se esfuerzan de manera constante por la infalibilidad total, con un temor excesivo a las críticas y los reproches que puedan ser consecuencia de sus propios errores.
Una característica común de esta necesidad neurótica es la búsqueda de defectos personales con el fin de cambiar rápidamente o encubrir o compensar de algún modo estas imperfecciones percibidas.
Características de las tendencias neuróticas
Es importante tener en cuenta que las tendencias neuróticas postuladas por Horney son inconscientes y compulsivas.
Esto supone que aunque la persona puede tener consciencia de sus efectos, nunca llega a percibir del todo hasta qué punto esos impulsos pueden estar siendo determinantes en su vida.
Por otra parte, como cualquier acto compulsivo, se produce sin ninguna valoración racional de las consecuencias, y suele llevar asociada una reacción de angustia consecuente a la frustración habitualmente sufrida.
La propia Horney hace la siguiente distinción entre los sentimientos normales y las tendencias neuróticas: “Las actividades neuróticas son casi una caricatura de los valores humanos a los que se asemeja. Les falta espontaneidad y sentido”. (Horney,1960).
►Recursos:
El proceso terapéutico. Ensayos y conferencias
►Fuentes:
Self-Analysis – Karen Horney – W. W. Norton & Company (2013)
Imagen cortesía de Pixabay.com